Seguidores:
viernes, 30 de diciembre de 2011
64#
Confieso que nunca he tenido pinta de ser la típica princesa de cuento.
Nunca he aspirado a convertirme en una pierde zapatos, jamás he pensado
en dormir cien años, y aunque nunca he creído apropiado entregar mi voz a
nadie, he regalado todas y cada una de mis palabras. Nunca me he visto
capaz de luchar por alguien, ni de enamorarme de un inmaduro Peter Pan
que no quiere crecer. Pero yo sí he creído tener envenenado cada poro de
mi cuerpo, y he esperado un beso que no llegó jamás cada noche al
acostarme. Confieso que nunca me he sabido las coordenadas que tiene un
corazón para buscarlo, y no perderme mientras le pierdo yo a él. Tampoco
he aspirado a convertirme en algo más que la antiheroina de mi propia
historia. No nací para perder cosas, y aún así, parece que me paso la
vida buscándolas. Confieso que nunca pensé que llegaría a estar aquí,
esperando a que aparezca mi hada madrina con un par de converse
desgastadas, que los cristales se me rompen, o mejor aún, dejando que el
teléfono suene encima de la mesa porque a mi Peter Pan, le ha dado por
hacerse mayor.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario